
Quien fuera durante dieciséis años alcalde de Málaga y tuviera tan excepcional y brillante vida política, profesional, intelectual y humana, Pedro Aparicio Sánchez, visitó Alhama, dio una conferencia en la misma, y durante muchos años, hasta su muerte, cada vez que hablaba de Alhama la recordaba como uno de los pueblos andaluces y españoles que le habían encantado en su vida.









