Columna: Convento de San Diego (IV)



En esta ocasión no es una hornacina, es una columna, la de la Inmaculada Concepción que data de 1728.


 El domingo 8 de diciembre de 2013 Alhama recupera, de manos de las Hermanas Clarisas del convento de San Diego de Alhama de Granada, una columna donde se erige una imagen de la Inmaculada Concepción que data de 1728 y que desapareció aproximadamente sobre el año 1849, así como todo el espacio que la rodea, conocido como “El compás” justamente al lado de la entrada al convento, y que en otro tiempo fuera todo diáfano.

 Para este reportaje, cuento con un testigo de excepción, nuestro paisano José Andrés Ciruela, maestro cantero, que fue la persona encargada de la restauración. Además de facilitarme unas fotografías de ese proceso, me cuenta lo siguiente:

 "Sí participé, recuperé el cuerpo de piedra, lo bajé al taller lo restauré, le modele a la figura de nuestra Señora del Sueño unas manos nuevas ya que las originales no las tenía, le modelé un nuevo rostro y le tallé una nueva cabeza (...) desde entonces cuando veo esa figura ahí arriba me siento un privilegiado ya que puedo presumir de haberle dado vida".

 Siempre estará en mi memoria este trabajo, tuve también el privilegio de recuperar todos los elementos del monumento de su Triunfo y el de añadirle las cuatro columnas que lo rodean y otros elementos para el jardín remodelado por las hermanas Clarisas.

 Esta obra estará siempre aquí dentro (...) en la memoria de este humilde cantero, para el beneficio de nuestra riqueza monumental y patrimonial.

 Dicho proceso comenzó en Febrero de 2012 con la recuperación del cuerpo de la imagen que fue derribado en los meses convulsos anteriores al estallido de la guerra civil y que durante 76 años estuvieron literalmente dando tumbos por el patio del Compás del convento, hasta esta fecha, donde se bajo a mi taller y comenzó su restauración, fue un proceso muy delicado debido al estado deplorable de dicha figura a la que le faltaban las manos y la cabeza, que se le reconstruyeron basándonos en imágenes de Inmaculadas de diversos sitios como, el mismo convento y de la parroquia, a través de fotografías de rostros y manos, se modelaron las manos , para tras un proceso de vaciado y mezclando diferentes tipos de calcarenitas y marmolinas procedente de las canteras de Huétor Santillán.

 El resultado un material fuerte y duradero y muy trabajable con herramienta mecánica.

 Del mismo material se moldeo el rostro tras hacer hasta cinco diferentes optando por la muestra numero tres de los mismos. Se esculpió en calcarenita la parte de atrás de la cabeza y el cabello. Tras la unión de estos elementos y el refinado y remates pertinentes se unió al cuerpo mediante pernos de galvanizado roscado y resinas epoxidicas, agregándole a la cabeza una corona de hojalata.

 A mediados de Abril de 2012 se erigió en su columna pedestal y acto seguido se recuperaron todos los elementos del Triunfo, la columna de orden jónico frisada, el pedestal y la base de escalones.

 Tras la finalización de las obras de rehabilitación de los jardines, se procedió a la colocación de cuatro columnas circundantes a la base del Triunfo y otros elementos como bancos una fuente y en la pared derecha a su entrada desde la calle san Diego se recuperaron otros elementos en piedra que se encontraron en la limpieza de este patio.
Otro día os contaré la leyenda de la Virgen del Sueño, recogida en el libro "Recuerdos marianos o Alhama y su Madre" de Federico A. Sánchez de Gálvez.

Como siempre, espero que os guste.

 

La leyenda
 
 “Descansaba tranquilo el vecindario de Alhama en la noche del 7 de diciembre de 1680.

 Sólo en una casa de la ciudad había luz. Porque solo un hidalgo velaba.

 El hidalgo era D. Pedro de Villarrasa y Cabello, muy devoto de la Inmaculada Concepción, que antes de darse al sueño hacia oración ante una pintura de dicho misterio.

 Cuando termino sus meditaciones, se dejó caer en su lecho, y durmió; pero su sueño le hizo ver cosas muy buenas.

 Helas aquí:

 Vio sobre el Pilar de María un trono de nubes, y en él sentada una mujer hermosa. Al pie, como sosteniendo su solio, estaban cuatro figuras de tosco sayal que escribían, mirando a la Bella como para inspirarse. Cuando esto veía, vinieron de lejos unas figuras de pardo sayal y luenga barba, acompañando a una pastorada tan interesante como la señora que ocupaba el trono.

 Sin duda no fueron llamados, porque marcharon.

 Después aparecieron otros, precedidos de los personajes a quienes cedieron el puesto los que escribían todos dijeron mil cosas a la Reina de la fiesta... ”Decreto erigir un trono de piedra, como y en el sitio donde tuviera la visión, y a la estatua de la señora se le llamaría del sueño.

 Como lo profetizó el padre Alberto murió el alhameño D. Pedro de Villarrasa y Cabello sin verlo realizado. Pero en virtud de su testamento, el 8 de diciembre de 1728 se celebro la dedicación de la columna que aún subsiste con la Inmaculada Concepción.”

 

Proceso de restauración, instalación y ubicación








Publicadas
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