La feria que nunca se quiso anunciar comprende los cuatro días de siempre, los del fin de semana más próximo al 24 de junio, con las actividades propias de la feria de siempre y con las incomodidades propias de su ubicación tras el desprecio que se ha hecho del recinto que, también siempre, se quiso tener y que ahora queda relegado.