Andrés García Maldonado, como presidente de la Asociación de la Prensa de Málaga, tomó la palabra en la concentración en esta ciudad; "esta barbarie no va en contra de los periodistas, sino contra la libertad de todas las personas".
Matar el libre pensamiento, París 2015
El asesinato de personas inocentes, sea cual sea su condición, nos produce como seres humanos una profunda consternación que adquiere aún más estupor y más desazón cuando las víctimas han sido elegidas por el simple hecho de que han ejercido libremente la más sagrada de las libertades: la de expresión y libre opinión. Sin esta libertad la Historia nos ha demostrado que no son posible las otras libertades y por eso esta es la primera que se cercena cuando se quiere dominar a un pueblo, a una sociedad, a un grupo humano.
Lo que ha ocurrido en Paris nos ha producido un profundo dolor pero a la vez una profunda preocupación. El asesinato de estos profesionales de la comunicación, de la expresión libre, es una gravísima amenaza a la convivencia en un escenario como es Europa, que ha vivido en su territorio la sangría de las dos únicas guerras mundiales y que ha sabido sobreponerse a sus consecuencias basándose en el respeto a los derechos humanos, a la libertad de movimientos, a la defensa del mestizaje de culturas de todos los confines de la tierra. A esa Europa defensora de la libertad que ahora se ve amenazada por algunos a los que le abrimos nuestras puertas para que vivieran con nosotros, para que se integraran respetando su señas de identidad.
Por defender la libertad de expresión muchos, en estos convulsos tiempos económicos, han perdido su trabajo, han sido marginados o perseguidos políticamente. Pero si a partir de ahora, la intransigencia de unos fanáticos siembran el terror para evitar el ejercicio de ese derecho, podemos asegurar con toda certeza que el libre pensamiento, la libre expresión, el periodismo libre, están muy seriamente amenazados.
Esta profesión, que se enfrenta a tantas penurias en los últimos tiempos, no puede sucumbir ante los bárbaros y no sucumbirá. Podrán matar a más periodistas, podrán poner más bombas, podrán atemorizar al mundo de la información, pero no podrán matarnos a todos y no podrán acabar con una cultura milenaria donde millones de antepasados dieron su vida para disfrutar de las libertades que ahora nos quieren quitar con metralletas.
Corren tiempos convulsos y también confusos. Por eso hoy ante el dolor por la muerte de tantos compañeros tenemos que mantener la razón serena y no confundir a los que los han asesinado con los millones de personas del mundo árabe que, a nuestro lado en el viejo continente viven, trabajan y conviven de forma pacífica y honrada. Es el momento del pesar pero también de la inteligencia, porque justamente los que han herido el corazón de París y el nuestro van buscando nuestra confusión y eso no se lo vamos a permitir.
Colegio de Periodistas de Málaga
Un centenar de personas se concentran en la plaza de la Constitución por el atentado de París
Periodistas, responsables políticos, miembros de la sociedad malagueña y personas anónimas se han sumado a esta protesta por los hechos que han costado la vida a una docena de personas
Las voces de los periodistas que llenan las redacciones a diario han guardado silencio esta mañana para mostrar su repulsa por el atentado terrorista de París. La plaza de la Constitución ha sido el lugar en el que se han concentrado estos profesionales, acompañados por representantes políticos, miembros de la sociedad malagueña y personas anónimas, que se han sumado a esta protesta.
El silencio se ha apoderado de la plaza, solo roto por un gran aplauso en recuerdo de la docena de víctimas mortales que se han producido por estos hechos. El presidente de la Asociación de la Prensa en Málaga, Andrés García Maldonado, ha tomado la palabra para insistir en que "esta barbarie no va en contra de los periodistas, sino contra la libertad de todas las personas".
El presidente de la asociación, organismo que ha convocado la concentración, ha asegurado que existe una gran preocupación con el problema del fanatismo. Al respecto, ha señalado que no se puede permitir la intolerancia.
Entre los responsables políticos también han insistido en que el atentado va contra la libertad de expresión, "algo fundamental en la sociedad en la que nos encontramos".
Las muestras de repulsa a lo sucedido en París se multiplican en las últimas horas. Si ayer ya hubo una concentración en la sede de Alianza Francesa en Málaga, también se han producido actos en otros puntos ligados al país galo, como el colegio Liceo Francés.