Y volvimos al País de Nunca Jamás

 En la Luna Teatro fueron los encargados de crear la magia necesaria para hacerlo posible la noche del sábado 9 de julio, en el Patio del Carmen.

 

 Todos, de niños, hemos estado alguna vez en Neverland, el País de Nunca Jamás, lo que pasa es que al crecer se nos olvida por completo, hasta que algo nos lo recuerda, esta vez ese algo ha sido la adaptación de la obra de Sir James Matthew Barrie, “Peter Pan” ese niño que se negó a crecer (porque al nacer escuchó a sus padres hablar de su futuro y no le debió de gustar) y que acompañado del hada Campanilla, Wendy Ángela Moira Darling y los niños perdidos del bosque se enfrentan al Capitán Garfio y el pirata Smith, que se la tiene jurada a Peter, desde que éste le corto la mano y se la arrojó a un cocodrilo.
 
 La Luna Teatro, igual que lo hizo con Alicia en el País de las Maravillas o el Mago de Oz, ha sido capaz de adaptar perfectamente la obra y recoger el espíritu endiabladamente divertido del original y ofrecer a los niños un espectáculo lleno de humor, magia, música y momentos de tensión, como ese en el que Campanilla muere envenenada y nos hizo a todos gritar “yo creo en las hadas”, única manera de traerla de nuevo a la vida. He dicho a los niños porque estoy firmemente convencido de que todos cuantos asistimos a la representación fuimos niños, independientemente del número de años que nos asignase el carné de identidad, o si no lo fuimos, si que conseguimos disfrutar como ellos de un espectáculo que nos hizo trasladarnos desde la silla que ocupábamos hasta “la segunda estrella de la derecha y luego, todo recto hasta el mañana” que es la dirección de “Nunca Jamás”
 
 Y ya instalados allí, ayudamos a Peter Pan a recuperar su sombra, y junto a Wendy, Campanilla y los niños perdidos del bosque nos enfrentamos a Garfio y Smith con espadas, arcos, tirachinas y un cañón. Los Niños Perdidos del Bosque fueron los niños elegidos de entre los del público Álvaro, Juan y Raquel que esforzadamente emplearon sus arnas para desbaratar los planes siniestros del Capitán Garfio, que no eran otros que matar a Peter Pan.
 
 Además de excelentes actores son muy buenos cantantes y nos dejaron también algunos números musicales en la mejor tradición de la comedia musical clásica (toda la obra tiene ese sabor especial de las mejores producciones del cine clásico que disfrutábamos en nuestra niñez). Los niños adultos que tenemos alguna edad pudimos reconocer temas de nuestra juventud como we will rok you de Quenn o do you think i am sexi? De Rod Steward, con las letras convenientemente adaptadas a la situación, por supuesto.
 
 Y así, entre aventuras, polvo de hadas, que ayuda a volar y fantasía transcurrieron el tiempo en el que volvimos a Neverland, en el que volvimos a dejarnos cortejar por la fantasía, los sueños y las ilusiones.
 
 Después de la obra se hicieron fotos con quienes del público quisieron y Laura López Martín saludó a nuestros lectores a través de una grabación en mi móvil,pero la técnica y yo somos bastante incompatibles y no lo gravé. Pero se mostró muy satisfecha de estar nuevamente en Alhama, lugar en el que se sienten muy bien recibidos, saludó a Alhama Comunicación y deseó un feliz verano a toda la gente de Alhama, según creo recordar.
 
Humos, música, acción, emoción, arte, en definitiva, el que, un año más trajeron a Alhama.
 
Por orden de aparición:
- Adrián Zamora, Peter Pan
- Mari Carmen Díaz, Campanilla
- Laura López Martínez, Wendy
- Javier Pérez, Pirata Smith
- Ángel Salanueva Ruiz, Capitán Garfio
- Dirección: Laura López Martínez.



Fotos: Prudencio Gordo.