Casi 110.000 crepes salen cada año de su plancha



"Lagüelita Luisa", la más veterana de las creperías granadinas, fue impulsada por dos alhameños hace un cuarto de siglo. En su carta se ofrecen actualmente cerca de 60 crepes variadas, entre dulces y saladas. (En la imagen Juan Manuel Corpas, haciendo crepes)

08/11/2006.- De la misma forma que la tortilla de patatas ha traspasado fronteras para ser consumida en todo el mundo, las crepes, - receta de origen  francés realizadas originariamente con harina, agua y miel, según el diccionario Larousse Gastronomique-,  saltaron los Pirineos para llegar a todos los rincones de España. En Granada el primer establecimiento especializado fue Lagüelita Luisa, localizado en el número 9 de la calle Casillas de Prats, muy cerca de la plaza de Gracia. Abiertas sus puertas en 1981, gracias a la iniciativa del alhameño Luis Corpas Pinos y su primo, sirve una media anual de 110.000 crepes, repartidas casi al 50 % entre sus sesenta variedades de dulces y saladas. 

Salon comedor de Lagüelita Luisa
 
 El nacimiento de la más antiguas de las creperías granadinas es de lo más curioso. Luís, hijo de una familia que tradicionalmente ha trabajado en el balneario de Alhama se encontraba a la sazón como camarero en una crepería de Madrid. Fue durante  las vacaciones de agosto de 1980 en que, como era habitual se desplazaba hasta su pueblo natal, cuando su primo le propuso montar uno de estas establecimientos en Granada. “Esto quedó como una anécdota pero al poco tiempo me llamó para decirme que ya tenía local. Tomé un avión, me vine para Granada y el 25 de octubre de ese año estábamos firmando el contrato”. Ellos mismos hicieron de albañiles para poder transformar los bajos en un coqueto establecimiento. Tras invertir 1,5 millones de las antiguas pesetas (9.015 euros)  para su puesta en marcha tuvieron que recurrir a una tía para solicitarle un préstamo de 25.000 pesetas (134 €) para poder comprar la materia prima y primeras bebidas. Por ello, reconoce que fueron unos inicios “muy difíciles, sin un duro, lo que entraba en caja se tenía que invertir en su totalidad”. En cuanto a la denominación indica obedece a su deseo de que fuese “algo muy nuestro” y para ello los primos se acordaron de su abuela común que tenía por nombre Luisa.

La crepe de la crepe

Tras este duro comienzo el negocio se fue estabilizando al conseguir abrirse un hueco en un sector donde no han tenido competencia ya que los pocos que se han atrevido a abrir han terminado por cerrar. El actual regente de Lagüelita Luisa reconoce que desde el principio esta receta francesa fue todo un éxito pues no era totalmente desconocida en Granada, entre otras cosas, porque siempre ha habido un alto número de emigrantes granadinos que han trabajado en el país vecino “y los que no las conocían le gustó mucho”. En la primera carta ofrecían en torno a una treintena de crepes, entre dulces y saladas, que ha ido creciendo hasta las cerca de sesenta. Entre las dulces las preferidas de los granadinos y clientes que han pasado por este establecimiento entre el 31 de octubre de 2005 y la misma fecha del 2006 son las cholet, mulata, chotuna, placho, argentina, santiago, frayo, roussillon y montblanc, en tanto que entre las saladas las más solicitadas han sido la enchilada, seguida de la cresaña, alba, mipope, anna, menoría, timan, chatard, completa y bretagne. En total en este período de tiempo se han consumido en su comedor  82.917 crepes dulces y 26.204 saladas. El precio medio de la unidad ronda los cinco euros. En el ejercicio 2005 la facturación de esta pequeña empresa ascendió a 180.000 euros y que el año anterior fue de 164.050 euros.

Luis Corpas, en su establecimiento.

Ilustres clientes

 Luis presume de tener un negocio muy constitucional pues cuenta con clientes de todas las razas,  clases sociales y edades. También de que por su salón han pasado desde toreros como Javier Conde o El Fandi del que posee un óleo en un rincón del comedor realizado por un antiguo camarero hasta políticos (Antonio Jara, José Torres Hurtado,…), cantaores (Carlos Cano, Enrique y Estrella Morente,  ), dibujantes (Martinmorales), artistas (Mariquilla, Mago Migue ), periodistas (Juan Bustos, Manuel Campo, Melchor Sáiz-Pardo,…), deportistas (Xavi,  del FC Barcelona, Blanca Fernández Ochoa, jugadores del CB Granada y FC Granada,…)  y muchos estudiantes pues , de hecho, la temporada alta de este negocio coincide con el curso universitario especialmente con los períodos de exámenes. En cuanto a los días de la semana más flojos, según reconoce Corpas, son los lunes y miércoles y el mejor los sábados en los que pueden llegar a comercializar entre 300 y 400 unidades.

Calidad y servicio

 Otro de los fenómenos curiosos es la fidelización de los clientes sin necesidad de recurrir a tarjetas con premios o descuentos. “Hay clientes que continuan viniendo desde que abrimos y que ahora vienen con los hijos y sus parejas, e incluso, con los nietos”. Al interrogarle sobre el posible secreto de esta fidelidad que dura un cuarto de siglo responde sin titubear que “en la  calidad de la materia de los productos empleados y en el servicio ya que siempre intentamos hacerlo mejor”. Para informar a sus clientes hace unos años que puso en Internet una sencilla página web  en la que se informa brevemente de su historia, especialidades, situación, teléfono para reservas y horarios concretamente en invierno de 18 a 00.30 horas salvo los martes en que cierra, excepto cuando coincide con víspera de festivos. En la misma aparece reproducido el típico logotipo de esta crepería, la abuelita con una sartén plana, realizado por el pintor granadino ya fallecido especializado en carteleras de cine y carteles para el Ayuntamiento y Diputación, Francisco Frías.

 Entre las anécdotas que atesora Luís hay una que cuenta como la más satisfactoria, en la que un cliente de origen galo al consumir su crepe se levantó de la mesa, y con la mano en el pecho dijo “yo soy francés y para comer las mejores crêpes he tenido que venir a Granada”.

Más información: www.creperieaguelitaluisa.com/es/

Teléfono: 958.255.518