El castillo de la discordia


Procedimiento y condiciones de permuta del castillo enfrenta a los grupos políticos desde hace año y medio. La portavoz de IU pide la nulidad de todo el proceso por ocultación de documentos.

05/05/2005.- Todos quieren el castillo para los alhameños. No obstante, los grupos con representación política en el ayuntamiento de Alhama (PSOE, PP e IU) no se ponen de acuerdo en cuanto al procedimiento y condiciones. Ha transcurrido un año y medio desde que el alcalde de Alhama, el socialista Francisco Escobedo, firmara el precontrato por el que se permutaba una explotación de áridos en el paraje conocido como Cerro del Naranjo a cambio del céntrico inmueble. No obstante, las dudas de la portavoz de IU, Dolores Iglesias, acerca de la consideración de éste como Bien de Interés Cultural (BIC) y la categoría del terreno donde se encuentra las canteras (comunal y no patrimonial) ha requerido varios cambios en la redacción del contrato que han culminado en la última sesión plenaria con la petición de nulidad de todo el proceso por ocultación de documentos que fue rechazada por el equipo de gobierno. Mientras tanto este asunto ha sido objeto de una pregunta en el parlamento andaluz y ha trasladado la tensión a la calle pues han aparecido pintadas en distintos lugares y se han difundido anónimos con amenazas contra el primer edil.

 Uno de los asuntos tratados en el último pleno municipal fue la modificación de los puntos dos y tres de contrato originario por el que se concretan que “Áridos y Desmontes de Áridos, Adepesa, suministrará  al ayuntamiento de Alhama de Granada 14.110 toneladas métricas anuales de material procedentes de la cantera” al tiempo que se libera al  consistorio del compromiso de aportación económica en caso de que el contrato no se materialice.

 En este punto la representante de IU recordó cómo hace un año pidió la dimisión del alcalde “por irresponsable y por firmar un contrato inadmisible”  basándose en que el bien que  se pretendía permutar se había comprado en 40 millones de pesetas (294.420 euros)  y  se  firmaba pagar por él 1,5 millones de euros.  Otro caballo de batalla ha sido la declaración del castillo como BIC por lo que en caso afirmativo se podría retractar o expropiar en su precio legal. “Hoy sabemos, porque está suficientemente certificado pues consta en acta plenaria que es un BIC, sujeto a una servidumbre de compra y venta y no tan fácil de colocar por su  actual propietario”, manifestó antes de añadir que en el momento de poner en venta el castillo habrá de ser notificado a la Junta y ésta podrá ejercer su derecho a tanteo y retracto. Así mismo, recordó que la situación jurídica del bien a permutar no ha estado nunca determinado pues el Cerro del Naranjo sigue siendo una propiedad comunal “y por tanto impermutable”.  Así mismo, Iglesias solicitó que todo el proceso “sea declarado nulo” al no haber recibido  hasta fechas recientes los documentos remitidos por parte del Servicio de Asistencia a Municipios de la Diputación.

Votación

 Por su parte, el alcalde leyó las respuestas de la Consejera de Cultura a las preguntas formuladas por IU en el Parlamento andaluz por las que sólo se considera BIC al único resto identificado en la calle Adarve, consistente en un torreón de sillares con 8,5 metros de altura y resto de dimensiones parecidas cuya situación en cuanto a la conservación es aceptable aunque necesitado de mantenimiento; el resto de edificio y jardines, carece de singularidad patrimonial por lo que no goza de especial protección. En cuanto a la protección del cerro manifestó que “con la información disponible el paraje está clasificado por las vigentes normas subsidiarias municipales como complejo serrano de interés ambiental  cuyo uso es compatible con las explotaciones de los recursos vivos y mineros, entre ellos, la explotación de áridos”.  La modificación de los dos puntos del contrato fue aprobada con los siete votos del equipo de gobierno, tres abstenciones del PP y dos votos en contra, uno de IU y otro de un concejal del Partido Popular. En cuanto a la petición de la desestimación del proceso por ocultación de información pues, según explicó el teniente alcalde, ante una segunda petición “éste informe tuvo entrada en el ayuntamiento hace unos quince días”,  fue desestimada por los siete votos socialistas y cinco en contra (cuatro del PP y uno de IU).