El sagrario es una donación de las monjas del convento de San Diego. (A su vez fue una donación a las mismas de una capilla privada).
Imagen superior el párroco y el interventor de la recuperación.
En la tarde noche del sábado, uno de septiembre de 2018, a las ocho y media de la tarde, después de la celebración de una solemne Eucaristía en la que colaboró a embellecer la liturgia con cantos, Máximo Ávila (carmelita de la tercera orden).
El párroco, Víctor Valero Mesa, pasó a bendecir el Nuevo Sagrario que presidirá el altar mayor de la Iglesia del Carmen o de la casa de nuestra patrona.
Al terminar la ceremonia el escultor imaginero pasó a detallar a todos los asistentes el proceso de intervención y las dificultades planteadas.
Los gastos ocasionados, se han subsanado, gracias a la aportación de los fieles del pueblo con donativos
El sagrario es una donación de las monjas del convento de San Diego. (A su vez fue una donación a las mismas de una capilla privada).
Ha sido intervenida por Alberto Olmedo, natural de Granada. Escultor imaginero. Ha estudiado talla en madera y dorado policromía en la Escuela de Arte de Granada.
Descripción del proceso de intervención
"Se trata de una pieza realizada en madera de pino silvestre con unas dimensiones de 100cm. x 70cm. x 40cm. (h x a x p), con grandes zonas policromadas imitando efectos marmóreos y molduras doradas en oro fino.
En líneas generales, al inicio de esta intervención, el sagrario presentaba un estado de conservación muy deficiente, debido, en mayor parte, a la acción del deterioro natural de los materiales constitutivos y a desafortunadas intervenciones que desvirtuaron totalmente el aspecto original.
Por ello, los objetivos fundamentales de este trabajo han sido devolver, en la medida de lo posible, la apariencia original a la pieza, así como su puesta en valor, dada su antigüedad y su potencial artístico.
En líneas generales, ha sido una tarea muy delicada, que ha necesitado de mucha atención y rigor para que la pieza volviera a tener el uso para el que fue concebida.
En primer lugar, se realizaron diversos estudios con el fin de buscar el método más óptimo para actuar la pieza. A continuación, se procedió a la fijación de los estratos de preparación y de policromía en aquellas zonas afectadas por los movimientos de ensambles y nudos.
Para culminar este primer proceso, se llevó a cabo una profunda limpieza química y mecánica, a fin de eliminar todo rastro de de suciedad, pegamentos, pegatinas y purpurinas, todos ellos ajenos al original – que se encontraba muy mermado y prácticamente reducido a los dorados del interior –.
Seguidamente, tuvo lugar la desinsectación de la madera, ya que ésta venía sufriendo un grave ataque de insectos xilófagos, llegando en algunos sitios a deshacer por completo el material constituyente del sagrario.
La intervención ha incluido el enriquecimiento de la base del sagrario por medio de un nuevo juego de molduras y el labrado de un tercer cuerpo que culmina la pieza. "
El sagrario ha pasado a formar parte del patrimonio de nuestro pueblo, gracias a la intervención del párroco.
Patrimonio desaparecido desgraciadamente, casi en su totalidad en la guerra civil. Es responsabilidad de todos nosotros valorar y custodiar lo que ha sobrevivido a tanta barbarie. Forma parte de nuestra historia.
En este artículo los alhameños queremos agradecer a este joven escultor imaginero, que tanto promete, su esfuerzo, dedicación, preocupación y bajo coste a tantas horas de trabajo dedicadas.
Proceso de la intervención
