Mientras continúa el tira y afloja entre la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) y el Ayuntamiento de Arenas del Rey, en cuyo término municipal se localiza el anejo del poblado de Los Bermejales, los vecinos continúan sin abastecimiento adecuado.
Imagen superior: La alcaldesa de Arenas del Rey y representantes de la Asociación de vecinos a las puertas de la Delegación del Gobierno de Granada.
La alcaldesa del municipio, Francisca García niega tajantemente que la cesión del servicio de abastecimiento de agua potable haya sido cedida al ayuntamiento. Por su parte, Maribel Aguado, presidenta de la Asociación de Vecinos, admite que “este es un servicio que la CHG ha prestado a los vecinos desde siempre y que están dispuestos a pagar si se suministra agua de calidad”.
“Es cierto que las competencias del agua son del Ayuntamiento, pero en el anejo de los Bermejales el abastecimiento lo está realizando la CHG. Es fácil de comprobar que no tenemos la cesión, pues ni tenemos las llaves del depósito. Tengo las manos atadas pues no puedo ni tocar las tuberías”, manifestaba la alcaldesa en declaraciones a IDEAL. Como prueba añadía el episodio vivido en la mañana del jueves cuando se les ha impedido la entrada a la técnica de Diputación y al policía local del municipio que pretendían comprobar la cantidad de agua que llegaba al depósito. Consultada la representante municipal sobre la solución de este problema insistía que lo más urgente es que se normalice el abastecimiento para lo que se puede adoptar una solución provisional mediante cortes de agua en tanto se averigua lo que está sucediendo pero “cómo va a controlar el ayuntamiento una cosa que no es del ayuntamiento”.
“Es cierto que las competencias del agua son del Ayuntamiento, pero en el anejo de los Bermejales el abastecimiento lo está realizando la CHG. Es fácil de comprobar que no tenemos la cesión, pues ni tenemos las llaves del depósito. Tengo las manos atadas pues no puedo ni tocar las tuberías”, manifestaba la alcaldesa en declaraciones a IDEAL. Como prueba añadía el episodio vivido en la mañana del jueves cuando se les ha impedido la entrada a la técnica de Diputación y al policía local del municipio que pretendían comprobar la cantidad de agua que llegaba al depósito. Consultada la representante municipal sobre la solución de este problema insistía que lo más urgente es que se normalice el abastecimiento para lo que se puede adoptar una solución provisional mediante cortes de agua en tanto se averigua lo que está sucediendo pero “cómo va a controlar el ayuntamiento una cosa que no es del ayuntamiento”.
Cortes sin aviso
Por su parte, Maribel Aguado insistía en que “nosotros protestamos porque nos han cortado el agua sin previo aviso. Deberían habernos avisado o comunicado al ayuntamiento de que nos iban a cortar o a reducir la cuota, pero no lo han hecho”. Entiende que lo más inmediato es que les den agua a los vecinos y que se deban tomar medidas, pues si una persona ha puesto un enganche ilegal que la denuncie. En cuanto a la gratuidad del agua para las familias de Los Bermejales señala que eso ha sido “desde siempre” aunque no hay nada por escrito pero que “las costumbres son leyes. El agua es gratis porque no los han permitido la CHG, en el momento que se ponga agua buena si hay que pagarla se pagará”.
Estas representantes fueron recibidas por el Delegado del Gobierno al final de la mañana del miércoles. Éste les mostró el informe de la CHG al que la alcaldesa se comprometió en enviarle una respuesta. Así mismo, requirieron la colaboración de la Diputación que envió a la técnica a la que no se le permitió la entrada en el depósito y que se ha tenido que volver a Granada con los datos facilitados por los trabajadores de la CHG. La Asociación de Vecinos tiene prevista una reunión en la jornada del viernes y entre las propuestas contemplan, además de concentraciones, la remisión de un escrito a Sanidad “pues no es saludable no disponer de agua y porque hasta que no nos den agua no vamos a parar”.
También el diario Granada Hoy se hacía eco de la respuesta dada por la alcaldesa. Con el título
"Arenas del Rey alega que no tiene potestad para colocar los contadores":
Si el miércoles la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir instaba al Ayuntamiento de Arenas del Rey, a que se hiciera cargo de las incidencias producidas en el poblado de Los Bermejales, ayer la alcaldesa de Arenas del Rey, Francisca Josefa García, daba su propia versión del asunto.
García explicó que desde el Ayuntamiento se están llevando a cabo todas las actuaciones posibles para resolver los problemas de abastecimiento surgidos el fin de semana. A tal efecto, ayer se envió a una ingeniera y un policía local al depósito, que no pudieron acceder al recinto.
La Conferencia Hidrográfica acusó a la corporación municipal de dejación en sus funciones, al no controlar el consumo que del agua se estaba realizando. Algunos de los vecinos destinan el agua potable del embalse al riego de los campos o a llenar sus piscinas, superando así el máximo de consumo de agua total permitido por habitante, además de evadir el pago del suministro.
Según Francisca Josefa García, la gestión del embalse se desarrolla en exclusiva por la Confederación. Aunque desde el 2008 las competencias están adjudicadas al Ayuntamiento por ley, el traspaso efectivo de funciones todavía no se ha producido.
Precisamente el traspaso en la gestión, recuerda la alcaldesa, estaba previsto para septiembre. Así pues, Francisca Josefa García no entiende las acusaciones vertidas contra ellos por la Confederación, cuando ya habían acordado con la subdelegación la cesión de competencias.
La alcaldesa explicó que el Ayuntamiento no puede controlar el consumo de agua, ni tampoco llevar a cabo el cobro, porque no son ellos quienes tienen la potestad para colocar los contadores. Francisca Josefa García manifestó que 'los que tienen que dar el agua a los vecinos son ellos. Yo ya no sé qué hacer más'.
El pasado seis de julio, tras llenar el embalse un día antes, los vecinos de Los Bermejales se quedaban sin agua. El depósito estaba vacío y se remedió la situación de forma momentánea, a la espera de determinar quién controlará en adelante el abastecimiento.