Nuevo alojamiento rural en Alhama

Empresas y economía

Cortijo Moyano amplía la oferta de alojamientos rurales en la comarca de Alhama. Situado a ocho kilómetros de la población ha supuesto una inversión cercana al millón de euros.

30/04/2006.- Es Alhama uno de los pueblos más bellos de Andalucía. Así lo escribieron desde los viajeros árabes Ibn Batuta e Ibn Aljatib hasta los románticos Teophile Gautier, Richard Ford o Washington Irving. Naturaleza y arte se han conjugado de tal forma que se ha convertido en uno de los pueblos granadinos de obligada visita. Su impresionante cañón por entre los que discurre plácidamente el río Marchán junto a la inconfundible silueta de la iglesia parroquial de la Encarnación y la belleza de su balneario no dejan impasible a quien decide acercarse a la ciudad de los Tajos.  Pero Alhama ha tenido durante siglos una asignatura pendiente: ofrecer un lugar adecuado para comer y dormir. Las cuatro posadas alhameñas del siglo XIX no salen muy bien paradas en las descripciones que de ellas realizan los ilustres visitantes.

 Un siglo más tarde sólo tres pensiones (Ana, San José y Tere) y los dos hoteles del Balneario ofrecían la posibilidad de encontrar en la población comida y cama. Afortunadamente en la década de los 90 se inicia de forma incipiente el turismo rural y aparecen los primeros establecimientos que invitan a los viajeros a quedarse para disfrutar más a fondo de este maravilloso entorno. El Ventorro, Piscina Pato Loco, Cortijo Márquez, Los Caños de la Alcaicería, Huerta Ochoa o Huerta Cuberos, en los alrededores de Alhama, y La Seguiriya, Santaren y Casasola en el propio casco urbano, consiguen que el turismo llegue y se quede por unos días en la ciudad, sobre todo, si la estancia coincide con algún período festivo como el Carnaval, la Semana Santa, el Festival de la Canción o la Velada de los Romances.

Fachada principal del Cortijo Moyano

La saga de los Fernández

 Los amantes a la naturaleza tienen, desde hace unas semanas, un nuevo alojamiento rural: el Cortijo Moyano, a cuyo frente está Manuel Fernández Moyano, que junto a sus hermanos, Paco y Rafa, supone una de las sagas familiares más importantes de esta tierra dedicadas a la hostelería que se iniciara con el padre en el céntrico Bar Terranova. Por eso, cuando preguntamos a Manolo, -como es conocido por los alhameños este camarero metido a empresario-, desde cuándo trabaja en este sector contesta sin dudar ni un momento “estoy detrás de un mostrador desde que me parió mi madre”. Hecho que, para más señas, sucedió un 6 de julio de 1959. Primero en el negocio familiar y más tarde, como autónomo al frente de la Discoteca “No-Do” y “Pizzería Ca’Manuel” suman otros 27 años. Pero el gran salto acaba de darlo ahora con la apertura de su proyecto más ambicioso y que desea se convierta en todo un referente para los turistas que se acerquen a Alhama o las empresas, peñas, grupos que decidan convertir su establecimiento en el lugar de celebración social o familiar entre los que se incluyen lógicamente los de la BBC (bodas, bautizos y comuniones).


Uno de los dormitorios del cortijo Moyano


Ducha

 El Cortijo Moyano está situado a ocho kilómetros  de Alhama, en dirección a Játar. Señalizado por una enorme tabla colocada junto a la carretera habrán de recorrerse 800 metros de carril de tierra que discurre junto a cultivos bajo malla. Una enorme cuesta, perfectamente asfaltada, conduce hasta este nuevo establecimiento que tiene como telón de fondo unas magníficas vistas del macizo montañoso de la Tejeda. Por su ubicación, sobre unas diez hectáreas, adquiridas hace unos 20 años y localizadas en el conocido en la zona como Pago Bigotes y Huerta Conejo. Manolo afirma que aspira que para sus clientes su paso por esa finca sea “la mejor medicina contra el estrés”. Iniciadas las obras hace tres años, y tras superar diversos problemas burocráticos, por fin pudo abrir la pasada Navidad. En torno a un millón de euros le ha supuesto al propietario la adquisición de los terrenos, la construcción y equipamiento de este alojamiento rural para el que “ha recibido cero de subvenciones”. Pese a ello, ya dispone de una pista polideportiva y trabaja en estos días para mejorar las zonas ajardinadas y poder ofrecer un campo de minigolf.

Comidas y postres caseros
 


 Tras la subida, a mano izquierda se encuentra la piscina de 5 por 12 metros y de 1,30 a 2,40 m. de profundidad y uno de los apartamentos que primero fue residencia familiar. Dos apartamentos más y diez habitaciones dobles, una de ellas denominada cariñosamente “La Suite” al estar dotada con bañera de hidromasajes, conforman la oferta. Varios arados antiguos, un trillo, un yugo (“uvio” según los “jameños”) y una rueda de carro dan un toque de rusticidad al emplazamiento donde en estos días florecen los ciruelos.  El salón comedor cuenta con espacio para 120 comensales y está equipado de biblioteca. En la carta se puede elegir entre una docena de platos entre los que se incluyen los típicos de la zona. “la olla jameña, las migas, las papas a lo pobre, la ensalada a base de los propios ingredientes ecológicos (en su estación) y el choto al ajillo. Como postres caseros se ofrecen natillas, flanes, carne membrillo y los dulces de las monjas Clarisas del convento de San Diego (tocino de cielo, bienmesabe,…) En cuanto a precios hay que señalar que el alojamiento más desayuno oscila entre los 60 y los 80 euros, y la comida ronda los 20 euros.

Los primeros grupos ya comienzan a llegar tanto de la comarca, como de Granada y de la provincia malagueña. “Hace unos días vinieron de una peña de autobuses de Málaga y para finales de este mes ya está concertada otra del Club de Ford Capri que van a realizar en Alhama una concentración”, indica. También aprovecha estas jornadas de tranquilidad para completar la oferta en la que se incluirá rutas cicloturistas, senderismo, pesca, paseos a caballo y deportes acuáticos en el vecino Pantano de los Bermejales. Como logotipo ha elegido un búho por ser un ave que se puede ver y oír en la zona y como símbolo de la suerte que espera le traiga a él y a toda su familia.

Información y reservas: 676.474.443

Texto y fotos exteriores: A. Arenas. Interiores Alfredo Salgado.